"Milagros a Lourdes", pues allí fuimos, pero sin nada que pedir. Por aquí no nos va mucho eso 😜. Antes de llegar a Lourdes hicimos parada, nuevamente, en Aínsa.
La localidad de Lourdes es tan famosa y conocida por su Santuario. Esta ciudad francesa se ubica en el sistema montañoso de los Pirineos, en las llanuras de Bigorre, a una altitud de 400 metros.
En 1858, esta ciudad se convierte en un importante centro religioso católico de peregrinación, primero local, luego nacional e internacional. Allí tuvieron lugar las apariciones de la Virgen a Bernadette Soubirous. La primera de estas apariciones fue el 11 de febrero de ese mismo año, luego se sucedieron 17 más.
Aunque lo más conocido sea el Santuario, del que voy a hablar a continuación, no es lo único que se puede visitar en esta comuna, también se puede ver el Castillo de Lourdes, del siglo XIV, residencia de los condes de Bigorre.
El Santuario de Nuestra Señora de Lourdes es un conjunto de edificios y lugares dedicados al culto de la Virgen María. Allí se encuentran las basílicas de la Inmaculada Concepción, la de Nuestra Señora del Rosario y la de San Pío X. También la Gruta de Massabielle, que como he mencionado antes, es donde la Virgen se presentó ante Santa Bernardita Soubirous, según la creencia católica. Se haya dentro del Santuario.
Este Santuario está compuesto por 52 hectáreas y 22 lugares de culto, es visitado por 6 millones de personas al año, aproximadamente. Abre sus puertas durante todo el año y el acceso es gratuito.
De abril a octubre se puede asistir a la procesión Mariana de las antorchas, a las 21:00 de la noche. Durante el período de Navidad, se reza el rosario cada noche a la luz de las antorchas en la Gruta, a las 20:30 de la tarde.
Una cosa que me resultó curiosa fue la Baslílica de San Pío X, una impresionante Basílica que se encuentra bajo el Bulevar Pére Rémi Sempé.
Esta iglesia subterránea fue construida para acoger a todos los peregrinos que se congregan en la localidad en las fechas indicadas. La Basílica mide más de 400 metros de largo y caben más de 24.000 personas.
De Lourdes viene la más que conocida agua milagrosa, que ni es bendita, ni curativa, ni milagrosa, es agua potable como otra cualquiera.
Esta agua surge de que la Virgen le dijo a Bernadette: 'Vaya a beber y a lavarse en la fuente'. Era un simple charco con agua sucia pero pronto empezó a salir agua limpia. A raíz de los supuestos milagros que se iban sucediendo en ese lugar, se popularizó como agua milagrosa.
Aunque este agua no haga milagros, si vas a Lourdes a visitar el Santuario, no olvides de coger botellas de agua de las fuentes habilitadas para ello.
Una vez en la vida, no está mal visitar este tipo de edificios religiosos. Y si es sin lluvia, mejor.
Qué ver: Santuario, Castillo, Lac de Lourdes, Museo de Cera, Basílicas del Santurio, Gruta de Massabielle, Mercado Les Halles, Cachot, Molino de Boly, Torre defensiva, Funicular del Pic du Jer, Ayuntamiento.
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Lourdes y la Virgen María